Funky Freakfast
Mi vida ha estado siempre cargada de experimentación. No hay cosa que me haya gustado más. Dar saltos entre tendencias, aficiones, pseudo pasiones, movidas… Un todo y nada. Pero si tuviera que reconocer algo a lo que siempre, de una forma u otra, he estado ligado ha sido al rap o más concretamente al hip-hop entendido de forma purista como los cuatro elementos (rap, turntablism, breakdance, graffiti). En tal caso mis experiencias con la pintura y el baile lo dejaré para otros textos y me centraré en este caso en el rap.
Desde relativamente pequeño usaba la poesía como herramienta de desahogo amoroso. Un planteamiento muy clásico pero me estaría engañando si no lo expresara así. Todas esas habilidades que se fueron gestando en torno a la rima, los versos y las estrofas se encontraron en mi temprana adolescencia con toda la estética que envolvía al rap, tanto desde un punto de vista de rebeldía como de mera estética. Que no es poco.
Junto con el tremendo personaje que firma las ilustraciones de mi humilde blog creamos un grupo primero (Nueva Raza) y luego otro (Funky Breakfast) como herramientas de expresión creativa. Creo que ambos lo necesitábamos. Y creo que a ambos nos vino bien para alejarnos de una realidad incómoda en un pueblo que no nos representaba demasiado. Al menos incómoda en nuestra adolescencia en la que todo es más difícil y hay que gestionar bien los deseos y las frustraciones.
Pero como creo que ya la gente puede saber, se supone que en el rap tu mensaje debe ir vinculado a tu día a día. Esto se cumplía en los orígenes pero se incumple acualmente. Y nosotros siempre fuímos conscientes de ello. Que podíamos montarnos nuestro propio encierro personal y creer que vivíamos en un ghetto pues sí (nuestra imaginación daba para eso y para más) pero no era cierto. Nunca deseamos además coches caros, ni éramos extremadamente consumistas. Nuestra realidad era otra.
En este trabajo que da nombre al texto (Funky Freakfast) creo que puede ser donde nos encontramos realmente con lo que somos. No sé si la temática es la acertada para un tema de rap pero sí que es algo que lo escuchas y sientes que forma parte de tí. Creo que eso es lo fundamental y más aun en el arte, que algo te represente.
Juzguen vosotros mismos. Si el rap es competición, a frikismo (cada uno de su palo) no nos gana ni dios.
